El buque de tendido de tubo 'Solitaire', uno de los más grandes del mundo, ha recalado el 16 de enero en el puerto de Cartagena para su puesta a punto durante los próximos seis meses.
Con esta escala, el enclave refuerza suposición como un puerto base en el Mediterráneo para la formación, reparación y mantenimiento de plataformas offshore.
La embarcación realiza labores de tendido de tuberías submarinas y ha llegado a realizar tendidos a más de 2.775 m de profundidad. Así mismo, el buque tiene una eslora de 299 metros, 40,6 metros de manga y 94.855 GTs, y si se tiene en cuenta el Stinger, llega a los 400 metros en total.
Para apuntalar estos servicios, la Autoridad Portuaria de Cartagena trabaja en la futura Terminal Barlomar, con 58 hectáreas de superficie y una zona de atraques para la industria offshore de dos hectáreas para dar servicio a todas las necesidades del sector.
Desde finales de 2018 el recinto se ha posicionado como puerto seguro para buques off-shore y han permanecido atracados en estancia prolongada, para trabajos de acondicionamiento y mantenimiento, de tal modo que ocho buques de este tipo, en estancias con duración desde los tres meses hasta ocho.