La Iru ha remitido esta semana una carta formal a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en la que "desea transmitirle la protesta unida y pacífica de los operadores de transporte y los cargadores de los 26 Estados miembros de la UE con respecto a la iniciativa de la Comisión Europea de introducir objetivos obligatorios de compra de vehículos de cero emisiones".
En su misiva, la organización internacional asegura que las empresas europeas de transporte "están firmemente comprometidos con la descarbonización, aunque consideran que las cuotas obligatorias de compra de vehículos de cero son desproporcionadas e inviables si no se articulan las condiciones necesarias".
De igual manera, el escrito también argumenta que esta oblgación es "potencialmente perjudicial para la competitividad, la cohesión del mercado interno y la continuidad del servicio".
Así mismo, la Iru aclara que no se trata de "una protesta contra los objetivos climáticos de la Unión Europea, sino contra un instrumento político que los operadores y cargadores creen que no tendrá los resultados previstos y que, sin embargo, distorsionará los mercados y perjudicará a las empresas".
La entidad afirma que "el sector del transporte de mercancías por carretera de la UE ya está transitando hacia los vehículos de cero emisiones y acelerará aún más este proceso cuando se den las condiciones regulatorioas y las operativa pueda realizarse con estos vehículos".