La falta de conductores y el aumento de la actividad demanda un incremento de las masas.
Hemos cerrado 2017 con sus luces y sus sombras, por un lado con nuestra satisfacción de contribuir como empresas a la recuperación económica y al aumento de la actividad del transporte y, por otro, con la negativa de los transportistas a negociar un gran acuerdo para que este incremento en la actividad suponga a una mejora en la competitividad del transporte de mercancías.
La importancia que la implantación de las 44 toneladas tiene para muchos cargadores choca con la oposición de los representantes de las empresas transportistas para los que no existe acuerdo ni contrapartida suficiente que justifique su apoyo a esta medida.
La falta de conductores y el aumento de la actividad demanda un incremento de las masas. Esta medida es positiva para España, como recogen los estudios realizados por instituciones independientes como INECO y la UPC, que cuantifican su beneficio económico entre 278 y 471 millones de euros, y el medioambiental en una reducción del 5% de emisiones.
Tampoco se precisa inversión en flota y, el impacto de la medida afectaría sólo al 4% del volumen de transporte, cuando el crecimiento de la actividad es superior a esta cifra.
¿Por qué, cuando las ventajas son tan manifiestas los transportistas, no quieren llegar a un acuerdo? Esperamos que en este 2018 se resuelva la incógnita y, sobre ella, sea posible cimentar un nuevo escenario de negociación. En cualquier caso, y como las 44 toneladas son importantes para la economía y la sociedad, continuaremos trabajando para que los reguladores encaren esta realidad como ya lo han hecho los países de nuestro entorno.
[sumario]La importancia que la implantación de las 44 toneladas tiene para muchos cargadores choca con la oposición de los representantes de las empresas transportistas para los que no existe acuerdo ni contrapartida suficiente.[/sumario]
Y seguiremos con nuestra mejor voluntad de colaborar con el sector del transporte para abordar otros retos, como son la revisión del Observatorio de Costes, la simplificación y racionalización de la Coordinación de Actividades Empresariales, el CMR electrónico, etc. También ha comenzado el año con el aumento del precio del gasóleo y la cuestión de los peajes y desvíos obligatorios.
Como representantes de empresas socialmente responsables, entendemos que debe revisarse la financiación de las infraestructuras pero debería asegurarse que ello no repercuta únicamente en el transporte de mercancías, y que los fondos recaudados se destinen realmente al mantenimiento y mejora de las carreteras.
La Comisión de Puertos ha comenzado su andadura, con nuestra participación, y estamos convencidos de la importancia del trabajo que allí se realizará para la competitividad transporte marítimo, favoreciendo a la economía española en su actividad exterior y en su conversión en la plataforma logística del sur de Europa.
Por otra parte, el transporte ferroviario de mercancías debería tener mayor prioridad, con más inversiones fuera del corredor mediterráneo, mejorando especialmente su conectividad con los otros modos.
Y no hay que olvidar que el transporte por vía aérea ha sido la estrella del año 2017, y todo apunta a que seguirá creciendo en 2018, teniendo otro modo de transporte cada vez más competitivo.
Como organización, Aeutransmer ha comenzado 2018 con un nuevo Comité Ejecutivo, con la voluntad de consolidarnos como representantes de los cargadores, de seguir participando en los foros en que defendamos los intereses de los usuarios de transporte, de colaborar con la administración y de tender nuestra mano a los transportistas para reconstruir un acuerdo que mejore el transporte.
Carlos CastánPresidente AEUTRANSMER
