El incremento de la demanda de servicios en la nube, la digitalización de las empresas y el auge de tecnologías emergentes como el internet de las cosas y la inteligencia artificial impulsan el desarrollo de centros de datos en España.
En este sentido, el país se posiciona como un hub clave para este tipo de infraestructuras y atrae inversiones significativas tanto nacionales como internacionales, de acuerdo con un reciente informe de Proequity.
Este fenómeno expansivo se traduce en una serie de aspectos esenciales del mercado, entre los que se incluyen un crecimiento acelerado y una ubicación estratégica, reforzada con la infraestructura de cables submarinos que conectan Europa con América y África.
En 2023, Madrid y Barcelona fueron las principales ubicaciones para centros de datos, con Madrid representando el 61% de la oferta nacional de centros de datos, según los cálculos de Proequity, mientras que otras regiones, como Aragón, Castilla-La Mancha y el eje Bilbao-Navarra, también están emergiendo como destinos con gran potencial debido a su conectividad y competitividad.
Así mismo, montar un centro de datos en España exige una planificación detallada y una inversión considerable, así como prestar atención a aspectos clave como la sostenibilidad y eficiencia energética.
De igual modo, la expansión del sector está creando nuevas oportunidades de empleo, de tal manera que, se estima que, en los próximos años, los centros de datos necesitarán más de dos mil profesionales altamente cualificados, especialmente en ingeniería y tecnologías emergentes.
