Las negociaciones de última hora no han conseguido evitar la huelga convocada en el sector logístico de la provincia de Guadalajara para protestar por la falta de acuerdo en la renovación del convenio colectivo de la demarcación castellana.
Es más, el enfrentamiento entre representantes sindicales y patronales parece haberse intensificado. Mientras que las organizaciones empresariales consideran la huelga una medida de presión excesiva y una huida hacia adelante, las centrales sindicales se sienten víctimas de un juego y critican la falta de voluntad negociadora de la otra parte, especialmente de Uno, que, según Comisiones Obreras, "se dedica a bloquear todas las mesas de negociación".
Así pues, este 14 de noviembre han comenzado las movilizaciones en el sector caracense de transporte de mercancías por carretera y logística, que cuenta con más de 40.000 empleados, y que se extenderán a los días 15 y 16 de noviembre.
Desde primera hora se han formado piquetesen algunas de las principales zonas de actividad logística de la demarcación, mientras que, al mismo tiempo, diversos operadores han intentado adelantar turnos y servicios para evitar en la medida de lo posible afectaciones graves de su labor en un período de gran actividad.
Comisiones Obreras y UGT aseguran que diversas empresas del sector han contratado autobusespara llevar a sus trabajadores a sus instalaciones y evitar que se les impida la entrada a sus centros de trabajo.
A media mañana, mientras los sindicatos cifran el seguimiento de la convocatoria de huelga en un 90%, las organizaciones empresariales caracenses estiman que los paros están teniendo nula incidencia, salvo en aquellas instalaciones más afectadas por la acción de los piquetes.
