Comisiones Obreras asegura tener conocimiento de ofertas de trabajo para conductores de países extracomunitarios, como Perú, Venezuela, Ecuador, Chile, Argentina o Brasil, realizadas por empresas españolas ubicadas en provincias como Soria, con peores condiciones laborales de las que se dan por convenio.
En concreto, el sindicato calcula que en alguno de estos casos el sueldo base de las y los conductores está 4.273 euros por debajodel salario mínimo interprofesional.
Además, según la central sindical, a estos conductores procedentes de fuera de la Unión Europea "se les proporcionan fórmulas flexibles de convalidación del permiso de conducir y se les promete vivienda".
Así mismo, Comisiones Obreras defiende que cada vez es más común este tipo de contrataciones, dado que los conductores de Europa del este tienden a regresar a sus países de origen, donde "tienen condiciones similares a las que les ofrecen aquí".
Por otra parte, el sindicato se apoya en las estadísticas oficiales para apostillar que en España hay 95.000 conductores buscando empleo y acusan a los empresarios de contratar personal de fuera de la Unión con el "único propósito de devaluar más todavía la profesión".
Según Comisiones Obreras, "en lugar de dignificar las condiciones laborales y salariales para atraer a personas jóvenes a la profesión, estas empresas buscan aumentar el número de conductores desempleados para presionar a la baja los salarios".
De igual manera, la central sindical también critica que la Administración "no actúe a favor de la inserción laboral de esas 95.000 personas desempleadas, ni persigan estas fórmulas de dudosa legalidad para el acceso a la profesión de personas poco cualificadas y dispuestas a trabajar por lo que sea" en lo que considera una "dinámica de profundizar en la devaluación salarial del sector y en la explotación de personas extranjeras".
