El conflicto de la estiba, con los múltiples anuncios de huelga que finalmente fueron desconvocados, así como las numerosas trabas administrativas en el Puesto de Inspección Fronterizo, PIF, han afectado negativamente a los tráficos del puerto de Vigo.
Así se ha puesto de manifiesto en el último Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria, que no ha especificado cifras concretas. No obstante, ha informado de que los posibles paros de los estibadores han provocado la cancelación de una escala de un buque de Maersk y hasta cuatro de Hapag Lloyd, que han preferido descargar sus mercancías en otros puertos.
Por ello, el presidente del puerto, Enrique López Veiga, ha defendido la gestión del Gobierno, que “tiene que acatar una sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea” y liberalizar el sector, ya que España se enfrenta a multas millonarias que “deberán pagar todos los ciudadanos”.
Desvío de tráficos a Leixoes
Del mismo modo, se ha mostrado preocupado por el alarmante descenso del tráfico de pesca congelada, que en febrero ha caído un 11,95% en el acumulado anual, un 4%, lo que supone que el recinto portuario ha perdido hasta 4.689 toneladas de esta mercancía en solo un mes.
Para López Veiga, esto es consecuencia de la situación del PIF y el consiguiente desvío de este tipo de tráfico a Leixoes, en Portugal, donde no existe tanta rigidez en los controles sanitarios como en Vigo. Sin embargo, confía en que a lo largo del mes de abril se haya encontrado una solución, fruto de las conversaciones con el Ministerio de Sanidad.