Por contra, las pequeñas y medianas empresas del sector de la construcción son las que más tardan en cobrar sus facturas, seguidas de las pymes del textil. En concreto, las del sector de la construcción han registrado en el segundo trimestre un plazo medio de cobro de sus facturas de 95,1 días, 2,4 días menos que en el trimestre anterior.
También las pymes del sector textil han recortado levemente su plazo medio de cobro, hasta los 94,1 días, frente a los 96,4 días del trimestre anterior, aunque aún se hallan 34,1 días por encima de los plazos legales previstos.
Frente a la construcción y el textil, los sectores de distribución alimentaria y agroalimentario son los que menos tardan en cobrar sus facturas, con 69,1 y 70,9 días, respectivamente, cifras que, pese a todo, superan los plazos legales.
En el sector de la distribución alimentaria, en el primer trimestre de 2008, el plazo se situaba en 98,3 días.