Siete meses después de su suspensión en julio de 2016, este martes 7 de febrero se ha reanudado el servicio en la autopista ferroviaria VIIA Británica entre Calais y Le Bolou, en Francia. Al principio, se efectuará una rotación al día, pero está previsto que poco después se aumente a dos.
La línea tuvo que ser suspendida debido a los intentos de intrusión por parte de los inmigrantes y los daños que se estaban produciendo en los semirremolques, así como la degradación de las mercancías transportadas.
Ahora, las medidas de seguridad y de protección del transporte ferroviario en Calais se han reforzado, en colaboración con el puerto de Boulogne Calais y SNCF Réseau, y mediante un acuerdo de los servicios estatales.
Mejora de las condiciones de acceso
El compromiso de Francia por mejorar las condiciones de acceso a la instalación portuaria ha sido determinante para el restablecimiento del servicio, que ofrece una conexión directa entre España y el Reino Unido, por un coste del 10% al 15 % inferior en comparación con la carretera.
Asimismo, responde a las exigencias de eficacia logística, económica y medioambiental de los transportistas, por lo que se espera que siga evolucionando. De hecho, la iniciativa Calais Port 2015 aspira a promover este tipo de conexiones ferroviarias, que ya han demostrado su eficacia en otras líneas.
Así, la que une Bettembourg (Luxemburgo) con Le Boulou ha registrado una tasa media de ocupación de más del 91% en 2016, con 1.500 millones de toneladas kilométricas transportadas, lo que representa 67 millones de kilómetros recorridos por los camiones en ferrocarril.