La huelga de los estibadores del puerto de Felixstowe que ha tenido lugar en agosto ha hecho que aumente la congestión en el enclave y los tiempos de espera de los buques para la estiba y desestiba de las mercancías en el recinto.
Según los registros de VesselsValue, si a primeros del mes de agosto la espera media era de diez horas, a finales de ese mismo mes se había incrementado hasta las treinta horas.
A esto se viene a sumar que, muchas de las navieras no han podido establecer servicios alternativos, lo que ha dado lugar a una importante acumulación de contenedores vacíos en tierra, de tal modo que el tiempo que tarde la congestión de Felixstowe en volver a la normalidad dependerá en gran medida de cuánto se tarde en dar salida a los equipos acumulados, justo cuando el comercio empieza a prepararse para la temporada alta de fin de año.
Las previsiones más optimistas estiman que la congestión se debe a un hecho puntual, por lo que los niveles normales podrían recuperarse pronto.
Sin embargo, persisten nuevas amenazas de huelgas en Felixstowe y, al mismo tiempo, en el puerto de Liverpool se producirán movilizaciones laborales entre el 19 de septiembre y el 3 de octubre, con lo que se incrementa la presión sobre la cadena de suministro que alimenta al Reino Unido, en un contexto de fuerte incertidumbre, inflación disparada, altos costes energéticos y con el pico de actividad navideño ya en preparación.
