Los empresarios de Fuerteventura están preocupados por las consecuencias que puede tener en la economía isleña la paralización de las obras del nuevo dique-muelle de Puerto del Rosario, adjudicadas a la unión temporal de empresas que componen Rover Maritime y Satocan el pasado mes de enero.
Según su criterio, cada vez es más difícil para los barcos de gran tamaño acceder a estas instalaciones portuarias y, a la vez, la invasión rusa de Ucrania provoca un encarecimiento de las materias primas que, a su vez, fuerza el reajuste de los presupuestos fijados, por lo que se corre el riesgo de que se tenga que posponer esa construcción hasta la siguiente convocatoria de las ayudas Feder, en 2024.
Ante esta posibilidad, la Cámara de Comercio de la isla ha solicitado una reunión urgente con el presidente del Cabildo de la isla, y con el alcalde de Puerto del Rosario, con el fin de conocer el estado real de este proyecto, y su posible desarrollo, a la vista de la importancia que tiene para el crecimiento y desarrollo de la isla de Fuerteventura.
La iniciativa ha sido considerada por la Autoridad Portuaria de Las Palmas como una medida esencial para el incremento de capacidad del puerto y para la mejora sustancial de la calidad de servicio, toda vez que la instalación actúa como único puerto de interés general en Fuerteventura y debe atender al tráfico comercial de la isla, proporcionando los servicios necesarios para los buques, así como para la carga y descarga de las mercancías.
El aumento del abrigo en la zona sur del puerto permite, entre otras actuaciones, incrementar la calidad de la operativa en los muelles del puerto y la seguridad de las maniobras de los buques, de tal modo que la creación de un nuevo muelle adosado al dique, destinado preferentemente a la descarga de combustibles, aumenta la capacidad del puerto y mejora su seguridad.
El dique-muelle que se proyecta arranca de la zona meridional del borde exterior de la plataforma actual del puerto y presenta dos alineaciones. La primera cuenta con cien metros de longitud, mientras que la segunda, superpuesta a la anterior, tiene 375,2 metros de longitud.
Los trabajos tienen un plazo de ejecución de 17 meses y un importe de 25.767.048,27 euros.
