Los datos de un informe elaborado por Airports Council International, ACI, y dado a conocer esta semana reflejan que los volúmenes globales de carga aérea se han contraído un 6,7% anual en 2022, para sumar un total anual de 117 millones de toneladas métricas.
Según el análisis de la institución internacional, el descenso es un reflejo de las tensiones geopolíticas que sacuden al planeta, así como de las interrupciones que se registran en el comercio internacional y, como consecuencia, en las cadenas de suministro más alargadas. En concreto, los volúmenes de carga aérea de 2022 también están un 2,6% por debajo de los que había en 2019, antes de la pandemia.
Por otra parte, el trabajo también da cuenta de la concentración que existe en el mercado mundial de carga aérea, de tal manera que las veinte principales instalaciones aeroportuarias del mundo concentran un 42% de todos los volúmenes de carga que se movieron a escala global el año pasado.
En concreto, durante 2022 el aeropuerto de Hong Kong ha liderado el segmento 4.198.937 toneladas métricas anuales y un descenso de un 16,5%. A continuación se coloca Menphis con un volumen anual de 4.042.679 toneladas métricas y una caía de un 9,8%. Completa el podio mundial de la carga aérea el aeropuerto de Anchorage que ha movido en 2022 3.462.874 toneladas métricas, un 5,2% menos que en 2011.
Así mismo, también se colocan entre las veinte principales instalaciones de carga del planeta, por este mismo orden descendente, Shanghai, Louisville, Incheon, Taipei, Miami, Los Ángeles, Tokio, Doha, Chicago, Frankfurt, París, Guangzhou, Singapur, Cincinnati, Dubai, Leipzig y Shenzhen.
Todos ellos han registrados descensos en sus volúmenes de carga durante el año pasado, salvo el de Cincinnati, que ha crecido un 16,8% impulsado por ser el hub principal para los Estados Unidos de Amazon Air y por actuar como instalación de referencia de DHL para su actividad en el continente americano.
