Un reciente informe del Instituto Polaco de Transporte por Carretera y del Grupo Trans.eu ofrece una perspectiva relativamente optimista para el futuro a corto plazo del transporte europeo.
Según el trabajo, la demanda está creciendo, pero el sistema sigue bajo presión. En concreto, los datos apuntan que los volúmenes de tráfico de mercancías se expandieron en la mayoría de las rutas principales, mientras que la disponibilidad de transportistas disminuyó simultáneamente.
Esta tendencia llevó a un aumento general de los precios en el mercado spot durante el segundo trimestre de 2025, con un desequilibrio entre la oferta y la capacidad disponible que fue particularmente pronunciado en Europa Occidental.
A su vez, el mercado experimentó una estabilización gradual durante mayo y junio, seguida de una corrección pronunciada en julio, cuando las ofertas de transporte se dispararon en la mayoría de las rutas europeas, mientras que el número de búsquedas de transportistas cayó significativamente.
Los mayores aumentos de precios se observaron en diversas rutas, como las que enlazan entre Francia y España, con un aumento de un 15,9%, que se ha debido al aumento de los costes de combustible y la limitada capacidad durante la temporada de cosecha agrícola.
Por lo que respecta a España, el informe apunta que los flujos de carga han estado fuertemente influenciados por los patrones estacionales, especialmente por las exportaciones agrícolas hacia Francia y otros destinos, y, aunque las ofertas de transporte entre España y Francia aumentaron un 57% interanual, las búsquedas por parte de los transportistas disminuyeron, lo que muestra que el crecimiento de la demanda supera la disponibilidad de transporte.
Los expertos esperan que España mantenga su impulso hasta finales de 2025, respaldada por una sólida demanda de los consumidores y una logística impulsada por el turismo.
