En números gruesos, podemos estimar que de enero a mayo de 2023 se han perdido alrededor de 30.000 viajes de exportación de productos hortofrutícolas de España a Europa respecto al mismo período de 2022.
De incertidumbre, podíamos calificar la situación actual del transporte frigorífico en España, si nos referimos al transporte internacional de productos hortofrutícolas.
En este sector, ligado estrechamente a la agricultura, resulta muy difícil hacer predicciones, ya que estas pueden resultar desacertadas en cuanto se dan condiciones climatológicas adversas, ya sean elevadas temperaturas, heladas, lluvias torrenciales, sequía…
A estos efectos, pueden añadirse otros como la situación de los mercados o las producciones.
Si nos atenemos a los datos, por lo que respecta a las exportaciones de productos hortofrutícolas, expresadas en toneladas, desde España a Europa, podemos observar que en 2022 respecto a 2021, se redujeron en un 9,47 %.
Si analizamos los datos referidos a los cinco primeros meses del año 2023, últimos publicados, y los comparamos con el mismo período de 2021 y 2022, observamos una reducción del 2,38 % en 2022 en relación con 2021, de un 9,56 % en 2023 en relación con 2022 y un 11,27 en 2023 respecto al mismo período de 2021.
En los medios económicos, no suelen aparecer estas cifras que analizan las toneladas exportadas, sino que se publica el volumen de exportaciones por el valor de las mismas y esto resulta engañoso a efectos del sector, porque, mientras que en toneladas, las exportaciones de productos hortofrutícolas de España a Europa han ido cayendo en los últimos tres años, en valor de las mismas ha ido aumentando, creciendo hasta un 7,19 en los cinco primeros meses de 2023 en relación al mismo período de 2022.
En números gruesos, podemos estimar que de enero a mayo de 2023 se han perdido alrededor de 30.000 viajes de exportaciónde productos hortofrutícolas de España a Europa respecto al mismo período de 2022, considerando que más del 90% de estas exportaciones se hacen por camión, y estos son muchos viajes.
Sin datos más recientes, lo que se percibe actualmente en el sector es que se sigue en la misma línea de caída y, si la campaña de invierno no se adelanta respecto de estos dos últimos años, la situación puede resultar muy complicada para las empresas.
Ante un exceso de oferta de camiones la respuesta del mercado es una bajada en los precios, talón de Aquiles del transporte de mercancías por carretera.
Los últimos movimientos empresariales en el sector, con la adquisición de empresas transporte frigorífico por otras de mayor dimensión, o la entrada de fondos de inversión para reforzar su capitalización, nos hacen pensar que la estrategia responde a conseguir empresas más grandes y potentes económicamente, con servicios diversificados, capaces de equilibrar las relaciones con sus clientes a la hora de negociar precio y condiciones del transporte para poder conseguir una mayor rentabilidad.
No podemos saber los efectos que, finalmente, estas operaciones tendrán en el mercado y si servirán como efecto tractor para que se produzca un incremento de los precios del transporte para el resto de las empresas, que sería lo deseable.
[sumario]Ante un exceso de oferta de camiones la respuesta del mercado es una bajada en los precios, talón de Aquiles del transporte de mercancías por carretera”.[/sumario]
A estas incertidumbres, hay que añadir el resto de los problemas que afectan, de igual modo, a todo el sector: el incremento disparatado del precio de los camiones, del combustible o de la financiación; la escasez de conductores, etc...
En definitiva, a mi juicio, no veo razones para el optimismo y ojalá me equivoque.
