El pasado lunes 12 de mayo, el consejero de Territorio y Sostenibilidad de Cataluña, Santi Vila, ha manifestado el apoyo de su departamento para ayudar al sector del transporte a desarrollar "un proceso de modernización" que le ayude a mantener su tejido productivo, que en Cataluña es de 19.500 empresas de transportes, y a reforzar un sector "fuertemente atomizado".
Según el consejero, que ha clausurado la jornada 'La empresa de transporte después de la crisis. Retos y oportunidades', hay que generar estímulos y ser exigentes no sólo con el sector sino también "con los elementos distorsionadores, como los competidores que no actúan bajo los parámetros de un país moderno".
En este sentido, ha anunciado que el Departamento de Territorio y Sostenibilidad está implantando un nuevo sistema de inspección en el transporte para luchar contra el fraude y la competencia desleal. Además, Vila ha destacado que todas las medidas que se lleven a cabo se harán siempre de acuerdo con el sector y ha agradecido su comprensión por las medidas "difíciles" que hasta ahora han tenido que impulsar.
En cuanto a las infraestructuras, Vila ha defendido unas infraestructuras que se contabilicen no en kilómetros sino en tiempo, en retorno económico y en parámetros ambientales, un modelo que en Cataluña se culminará "cuando podamos digerir el sobreendeudamiento".