¿Cómo fomentar la competitividad del Registro Especial de Canarias?

Anave ha analizado los factores laborales y técnicos de la normativa española que están impulsando a los armadores españoles a elegir otros registros europeos.

02/02/2017 a las 0:53 h

La Asociación de Navieros Españoles, Anave, ha reclamado al gobierno que tome medidas para evitar que el Registro Especial de Canarias, REC, siga perdiendo tonelaje, al mismo tiempo que fomenta su competitividad relativa frente a otros registros europeos.

Así, en el marco de la Jornada 'Mar y transporte marítimo: necesidad y desafío. La visión de los navieros', en la que ha participado la Asociación, se han explicado las razones que impulsan a los armadores españoles a elegir otros registros europeos.

Algunas de ellas están relacionadas con aspectos laborales, como la inseguridad jurídica que existe actualmente en el enrole de marinos que no forman parte de la Unión Europea.

En esta línea, conviene destacar que esta profesión está pendiente de la aprobación trimestral del catálogo de ocupaciones de difícil cobertura, aunque no se ha aplicado la posibilidad de ampliar el porcentaje de marinos que no forman parte de la UE, que está contemplada en la Ley de Puertos.

Asimismo, la tramitación de los visados para los marineros es compleja y larga, pero sin embargo, no se exige a los marinos que entran en España para enrolarse en buques extranjeros. Por otro lado, desde la Asociación reclaman una regulación específica en España de las agencias de empleo de marinos.

Aspectos técnicos que limitan la competitividad del REC

Respecto a las causas relacionadas con la normativa técnica de seguros, Anave ha recordado que las posibilidades de delegación en organizaciones reconocidas, como las sociedades de clasificación, son todavía insuficientes, ya que la responsabilidad que se les exigía hasta hace sólo unos meses dificultaba que aceptaran la delegación.

Además, la normativa española sobre jornadas de trabajo y descanso va más allá de lo que previsto en los convenios internacionales, como los de la Organización Marítima Internacional (OMI) o los de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Por último, se ha explicado que la Ley de Navegación Marítima impone la existencia de acción directa por parte del perjudicado contra el aseguradoren los seguros de protección e indemnización, lo cual no sucede en ningún otro país europeo.

Para la Asociación, recuperar la competitividad del REC debería ser un objetivo común de la Administración, los armadores y las organizaciones sindicales, y todos deben estar dispuestos a eliminar los aspectos que diferencian las normas españolas de las internacionales en el ámbito laboral y técnico.

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