En el sector de los camiones se están buscando continuamente nuevas soluciones para reducir el consumo de combustible. Una solución es aprovechar la energía cinética del vehículo.
La energía cinética es la energía que tienen los objetos debida al movimiento al que estos están sometidos en cada momento, de forma que, cuando se reduce la velocidad de un objeto en movimiento, su energía cinética se transforma en otra forma de energía, conocida como energía potencial que tiene que ver con la "posición" de ese objeto.
Cuando un vehículo frena, su energía cinética se convierte parcialmente en calor, que se disipa en la atmósfera y se pierde. Por esto muchos fabricantes del mundo del automóvil están estudiando soluciones para aprovechar esa parte de la energía cinética en vez de liberarla como un excedente de calor.
Volvo Trucks ha conseguido con su nueva solución I-See aprovechar la energía cinética del propio camión para empujar al vehículo cuando sube los pendientes. Igualmente, en los descensos se utiliza la misma energía para acelerar.
Reducción del consumo hasta en un 5%
El sistema I-See está ligado al sensor de inclinación de la caja de cambios y obtiene de forma digital información sobre la topografía. Además, como el sistema no depende de los mapas siempre obtiene la información más actual. El sistema I-See puede registrar unas 4.000 pendientes en una distancia de 5.000 km.
La solución va ligada el programador de velocidad del camión, se hace cargo del cambio de marchas, del acelerador y del frenado en las pendientes, para garantizar que todo funciona de la forma que más contribuya al bajo consumo. I-See activa el punto muerto lo máximo posible, de forma que en determinados tramos de carretera no se utiliza nada de combustible en absoluto.
Gracias a este sistema se puede reducir el consumo de combustible hasta en un 5%. Para un camión con un funcionamiento normal, que recorra 140.000 km al año, el ahorro será de 1.000 litros de combustible al año.
Conducir en punto muerto
I-See lleva a cabo seis operaciones distintas para aprovechar la energía cinética al máximo. Por ejemplo, I-See acelera en las subidas, mantiene una marcha alta todo lo posible y mete punto muerto en los descensos para aprovechar el peso del camión como motor de propulsión.
El sistema funciona mejor en pendientes moderadamente largas y pronunciadas, porque permite que se pueda recorrer en punto muerto distancias largas sin utilizar el motor.
En punto muerto, el vehículo no utiliza combustible, pero para su circulación es necesario saber si la velocidad se reducirá o aumentará en el siguiente tramo de carretera. Otros factores que constituyen una diferencia son la resistencia aerodinámica y el peso del camión.