Madrid contará con una red de puntos móviles eléctricos para devoluciones on-line

La primera fase del nuevo sistema de recogida diseñado por iF Returns se implementará en las principales áreas comerciales de la capital, como Azca y las Cuatro Torres, y posteriormente se ampliará a otras ubicaciones.

10/05/2023 a las 20:28 h

iF Returns impulsará la implementación de la primera red móvil de puntos de recogida para devoluciones en línea, que ya está en funcionamiento en Madrid.

Este servicio itinerante se brinda a través de pequeños vehículos eléctricos destinados al transporte de mercancías que circularán por el centro de la capital, donde recogerán artículos devueltos en horarios preestablecidos para luego trasladarlos a centros de validación.

La primera fase del nuevo sistema de recogida diseñado por iF Returns se implementará en las principales áreas comerciales de la capital, como Azca y las Cuatro Torres, y posteriormente se ampliará a otras ubicaciones.

Desde la compañía aseguran que, demás de reducir hasta un 90% el impacto de CO2 de la logística inversa, esta solución permite a los clientes recibir el reembolso de inmediato, cuando el plazo promedio habitual es de 15 días.

Cada año, las devoluciones generan 2.500 millones de toneladas de residuosy producen 5 millones de toneladas de CO2 debido a los desplazamientos que conllevan y, según datos de iF Returns, en el caso de la moda, el 10% de los productos devueltos acaban en vertederos.

Además del impacto medioambiental de la logística inversa, esta también se ha convertido en un desafío para las tiendas en línea, ya que los cambios y devoluciones aumentaron un 41% en 2022, y su costo operativo es cada vez mayor para las empresas, situándose en promedio entre 8 y 12 euros.

Además de generar problemas en el inventario disponible, el 55% de los artículos devueltos pierden valor y vuelven al canal de venta con un precio más bajo. Todo esto hace que las devoluciones puedan representar entre el 10% y el 12% de la facturación de un comercio electrónico.

Con este sistema el objetivo es volver a poner la mercancía en servicio en un promedio de diez días, reduciendo en un 90% la pérdida de valor y además minimizando el riesgo de fraude, así como el deterioro asociado a las devoluciones.

 

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