Según Acea, la estrategia hace demasiado hincapié en las nuevas tecnologías.
Tras la publicación por parte de la Comisión Europea de la 'Estrategia europea para una movilidad baja en emisiones', la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (Acea) da la bienvenida a esta iniciativa, que promoverá la descarbonización del transporte en Europa.
La industria de la automoción está totalmente comprometida con la reducción de emisiones de dióxido de carbono en todos los segmentos de negocio. Sin embargo, ya que la estrategia está centrada en el transporte por carretera, la asociación reclama un enfoque más equilibrado, que incluya también el transporte aéreo, marítimo y ferroviario.
En este contexto, señalan que es necesario un mayor desarrollo de la infraestructura para vehículos de combustible alternativo, de modo que el mercado de vehículos de cero emisiones o, en su caso, de bajas emisiones, se haya fortalecido para el año 2030.
Nuevas tecnologías en la conducción
Aunque la estrategia engloba la movilidad digital, los precios y los recursos energéticos, la asociación ha explicado que la mayoría de las medidas propuestas hacen referencia a las nuevas tecnologías aplicadas a vehículos.
Consideran, por tanto, que no están suficientemente enfocadas hacia otros factores que influyen en las emisiones, como los combustibles, la renovación de flotas, la mejora de las infraestructuras, el comportamiento del conductor o el potencial del de los vehículos conectados.
Además, dependiendo de su función, la mayoría de los camiones se fabrican en cada caso según las peticiones del operador, por lo que no debería utilizarse el mismo enfoque en una política de reducción de emisiones que en el caso de los automóviles.
Actualmente, la industria de la automoción trabaja junto a la Comisión Europea en una herramienta de simulación digital, Vecto, que a partir de 2018 permitirá a los fabricantes proporcionar valores certificados de emisiones de CO2 a sus clientes para cada tipo de camión.