Los operadores marítimos de contenedores acaban de tomar un poco de aire tras el aumento del 153% en las tasas de flete en la ruta Asia-Europa, que acumulaban 14 semanas de descensos y que ha pasado durante los últimos días de los 670 dólares/40 pies a los 1.698 dólares/40 pies, en la ruta referente de este comercio, la que une los puertos de Rotterdam, Holanda, y Shanghai, China.
No obstante, la situación no es demasiado esperanzadora para las navieras, ya que el ejercicio anterior estos picos de precios se vieron continuados por semanas de caídas. De hecho, se espera nuevos picos al alza para el próximo mes de junio, pero los fletes caerán hasta entonces según recoge el último informe de Drewry Maritime.
En opinión de la consultora, los fletes se mantendrán durante el presente ejercicio por debajo de los registrados en 2014, situación que viene motivada principalmente por la desaceleración económica en China, que está afectando principalmente al valor de las importaciones del país asiático.
Así, el valor de la mercancía importada a China ha caído un 6% desde el primer trimestre de 2014, pasando a resultados negativos este 2015, mientras que las exportaciones, aunque aún se mantienen en positivo, han disminuido en abril también un 6%, lo que reduce el promedio de crecimiento del último año al 7%.
Sin embargo, este crecimiento del 7% demuestra que China sigue siendo el país que más bienes fabrica, pero la distribución a mercados clave está cambiando y el ritmo de crecimiento se está desacelerando.
Preocupación para las navieras
Por todo ello, el debilitamiento de la demanda en el mercado de Asia-Europa se convertirá en la mayor preocupación de los navieros, si no lo es ya actualmente. El mismo se ha notado especialmente en las rutas por el Mediterráneo desde Asia, que han descendido un 1% en el primer trimestre de 2015, reducción que si bien no ha sido demasiado importante, es significativa por ser la primera caída en los dos últimos años.
Del mismo modo, la desaceleración experimentada entre Asia y la costa oeste de Estados Unidos ha venido motivada principalmente por los problemas de congestión en los puertos de este área, y ha traído consigo que aumenten los tráficos entre los países asiáticos y la costa este.
Sobrecapacidad
En este contexto de desaceleración, la debilidad de la demanda se ve agravada por el gran número de buques portacontenedores que están desplegados, y se irán incorporando, a la ruta Asia-Europa.
A partir de mayo y hasta finales de 2015, serán entregados a los operadores un total de 630.000 TEUs de capacidad en nuevos buques de más de 10.000 TEU, con unos niveles similaresprevistos para 2016 y 2017. Entre ellos, con toda probabilidad, los buques de más de 14.000 TEUs serán incorporados al comercio Asia-Europa, lo que supone incrementar la oferta 503.000 TEUs, sólo en este 2015.
Además, las navieras también tendrán problemas para destinar a otros servicios los buques de menor tamaño que cubren esta ruta.
Por todos estos motivos, desde Drewry sostienen que la prisa por encargar mayores contenedores ha provocado un exceso de capacidad en este comercio que hará muy difícil mantener una tasas rentables para el transporte marítimo.