Las entregas realizadas con este servicio son grabadas íntegramente.
Pese a la rápida evolución de los servicios logísticos asociados al comercio electrónico, las entregas fallidas siguen siendo, desde que se iniciaran estos servicios, uno de los principales problemas para la gestión de los envíos de e-commerce a domicilio.
Muchas empresas del sector siguen dándole vueltas a posibles soluciones. Algunas de estas opciones pasan por la instalación de buzones inteligentes y taquillas, ya sea en oficinas o en ciertos puntos de las comunidades de vecinos en áreas residenciales.
Sin embargo, otra opción que también evoluciona es la posibilidad de garantizar el acceso de los repartidores a ciertas zonas comunes, e incluso a las propias viviendas a través de dispositivos electrónicos que permitan la realización de las entregas y, al mismo tiempo, mantengan la privacidad y seguridad de los domicilios.
En este sentido, UPS ha iniciado recientemente una serie de pruebas piloto con dispositivos electrónicos que envían una acreditación al mensajero para que pueda acceder a una comunidad de vecinos o a una vivienda y, de igual modo, fijan la hora de entrada e identifican al trabajador para contar con un registro fehaciente de cada entrega, así como la grabación de la recepción de cada paquete.
La empresa norteamericana de paquetería ya ha empezado a probar este servicio en un grupo de apartamentos que cuentan con estos dispositivos de la marca Latch en los distritos neoyorquinos de Manhattan y Brooklyn.