La Policía Portuaria y el personal administrativo de la Autoridad Portuaria de Baleares se concentrarán este miércoles 30 de abril a las 11:00 horas frente a su sede en Palma bajo el lema “Stop precarización. La policía no se toca”, para denunciar el deterioro progresivo de sus condiciones laborales y las graves consecuencias que puede tener en la seguridad de los puertos y de la ciudadanía.
Así se ha expresado Gabriel Bosch, el presidente del comité de empresa de la Autoridad Portuaria, donde la Coordinadora de Autoridades Portuarias es el sindicato mayoritario, junto con CCOO, UGT y SPPLB. Bosch ha señalado que la movilización responde al vaciado progresivo de funciones, un desfase cada vez mayor entre salario y los coste de vida, la ausencia de un coeficiente reductor que reconozca la penosidad del trabajo por turnos en el cálculo de la edad de jubilación, así como la falta de medidas de segunda actividad para agentes de mayor edad.
A estas reivindicaciones se suman, según explican, fallos reiterados en la gestión del vestuario, la pretensión de eliminar elementos de defensa personal y la intención de externalizar o automatizar funciones clave. Todo ello, según asegura, pone en riesgo la seguridad del personal y de los usuarios: “Estamos ante una cadena de decisiones que no sólo degradan nuestras condiciones laborales, sino que también ponen en jaque la seguridad en unos espacios críticos para la economía y la movilidad como son los puertos”.
La situación cobra especial relevancia teniendo en cuenta la cercanía de la temporada estival, un periodo en el que la operativa portuaria se intensifica de manera exponencial, por lo que con la movilización del día 30 se pretende defender la necesidad de mantener unas condiciones laborales dignas y seguras.
