El consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Valencia ha revisado el informe de la Presidencia sobre las cuentas anuales del ejercicio de la entidad en 2023.
En concreto, el ente gestor portuario tuvo un resultado positivo el pasado ejercicio de 26.321.335,58 euros y una cifra de negocio de 141,27 millones de euros, lo que significa un descenso anual de un 0,8%, que se achaca a los descensos en la tasa del buque, tasa de la mercancía y tasa de actividad.
Por lo que respecta a la deuda, la Autoridad Portuaria continúa manteniendo la tendencia a la reducción y ha cerrado el ejercicio con una disminución de 27 millones de euros en su endeudamiento bancario a largo plazo, lo que, según el criterio de sus responsables, fortalece su capacidad de inversión a futuro.
Por otro lado, el consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Valencia también ha sido informado de la admisión de las cuatro ofertas presentadas al concurso de adjudicación para la ejecución de las obras del muelle de contenedores en la ampliación norte del puerto procedentes de otras tantas uniones temporales de empresa integradas por Acciona Construcción, Jan de Nul NV y Grupo Bertolin, por Dragados, Rover Maritime, Torrescamara y Cia de Obras, Dredging International España y Dravo, por FCC Construcción, Pavasal y Boscalis, así como por Sacyr Construcción, Sociedad Anónima Trabajos y Obras, Becsa y Agrupacion Guinovart Obras y Servicios Hispania.
Así pues, la mesa de contratación de la entidad ha confirmado que los documentos relativos a los medios personales y materiales requeridos en los pliegos del procedimiento de adjudicación son suficientes en las ofertas presentadas por todas y cada una de las empresas concurrentes al expediente dadas a conocer a primeros de mes.
Los responsables del ente portuario estiman que la nueva terminal de contenedores aunará tecnología, ecoeficiencia, intermodalidad y sostenibilidad para ofrecer un óptimo servicio a la economía española y mantener el carácter interoceánico que garantiza la conectividad del puerto con los cinco continentes. Además, generará empleo y dinamizará la actividad económica de su hinterland.
Esta infraestructura, que se ubicará en aguas abrigadas de la ampliación norte cuyas obras finalizaron en 2012, tendrá una superficie de unas 137 hectáreas y 1.970 metros de línea de atraque, con capacidad para albergar cinco millones de contenedores.
La terminal contará con diseño, tecnologías y equipamiento de última generación, y una instalación totalmente electrificada, que permita atender los grandes buques portacontenedores en servicio, con elevados rendimientos tanto en las operaciones marítimas como terrestres.
