La Autoridad Portuaria de Barcelona ha movido 64 millones de toneladas durante el último año, registrando un descenso del 9,8% en sus tráficos fruto de un contexto internacional complejo, la baja demanda a nivel europeo y un descenso importante de las exportaciones, así como una comparativa con un 2022 de récord.
Sin embargo, el tráfico del hinterland, es decir, las mercancías de exportación y de importación que salen y entran por el puerto, han experimentado un mejor comportamiento, con 33,7 millones de toneladas y un descenso del 4,3%.
Esto se debe a que los que más han caído han sido los tráficos de contenedores y graneles líquidos, que son los de menor valor añadido y que tienen menos impacto positivo en la economía local.
En concreto, el puerto ha registrado un movimiento de 3,3 millones de TEUs, un 7% menos que un año antes, debido principalmente a la caída del 20% en los contenedores en tránsito y del 12% en las exportaciones, que han sufrido descensos en prácticamente todos los sectores.
Sin embargo, las importaciones se han mantenido respecto al tráfico de 2022, con un leve retroceso del 1%. El cabotaje, por su parte, ha cerrado con un notable crecimiento del 18%.
Hub de entrada de los vehículos eléctricos fabricados en China
Por su parte, los automóviles, uno de los tráficos con mayor valor añadido, han experimentado un crecimiento del 33,7%, con 790.000 unidades. Este incremento se extiende a exportaciones, tráficos, cabotaje y, sobre todo, importaciones, que han batido el récord con 246.000 unidades y un incremento del 54%.
El puerto, de hecho, se ha convertido en el principal hub de entrada de los vehículos eléctricos fabricados en China para el sur de Europa y el Mediterráneo. El 34% del total de vehículos importados son eléctricos y de éstos, el 92% proviene de China. Las exportaciones, por su parte, han crecido un 26%.
En cuanto a los graneles, los sólidos registran 4,8 millones de toneladas y un crecimiento del 5,6%, por el aumento del 15% en las importaciones debido a los fuertes crecimientos de los cereales y el haba de soja.
En el grupo de los líquidos, se ha llegado a 13 millones de toneladas, con un descenso del 17,1% producido, principalmente, por un descenso de los productos petrolíferos, especialmente la gasolina y las importaciones de GNL.
El tráfico ro-ro, por otro lado, ha alcanzado las 414.000 UTIs, un 1,3% menos que en 2022. En cuanto al movimiento de pasajeros, ha crecido un 34,9% debido a una mayor ocupación de los barcos.
En concreto, el incremento en el movimiento de cruceristas ha sido de un 52,9%, con 3,5 millones de movimientos. En cuanto a la tipología de pasaje, los movimientos de puerto base suman el 53%, mientras que los de tránsito representan el 47%.