China quiere fusionar en una misma compañía a las navieras Cosco y CSCL
Los dos operadores marítimos de contenedores propiedad del gobierno chino, Cosco y CSCL, han suspendido este mes de agosto su cotización en bolsa debido a sus planes de fusión, enmarcados en la estrategia de las autoridades del país para reducir el número de empresas de titularidad pública.
A principios de mes, el gobierno chino ordenó a las dos principales navieras estatales que diseñaran un plan para su fusión, algo que ya ha sucedido en sectores como el ferroviario. Según la prensa del país, la administración ha exigido a las empresas un plazo de sólo tres meses para establecer este plan de unificación.
Hace poco más de un año, las autoridades asiáticas mostraron su desaprobación a la constitución de la Alianza P3, que iba a establecerse entre MSC, CMA CGM y Maerks Line, basándose en las reglas que regulan la concentración de empresas en el país asiático.
Ahora, el mismo gobierno quiere unificar a dos de las principales navieras de contenedores a nivel mundial. En concreto, Cosco ocupa actualmente el sexto puesto del ranking de operadores y CSCL el séptimo.
Según datos de un reciente informe de la consultora Drewry, el operador resultante contaría con una capacidad de alrededor de 1,5 millones de TEUs, con lo que se establecería en cuarta posición del ranking, solo por debajo de las tres navieras cuya cooperación prohibió, precisamente, el gobierno chino.
Para la consultora, la causa de la fusión sería la situación financiera de ambas navieras, que habrían acumulado unas pérdidas de 911 millones de dólares en el último lustro.
¿Qué supondría para las alianzas?
Por otro lado, cabe destacar que las dos navieras mantienen cooperaciones con otros de los principales operadores marítimos de contenedores. Así, Cosco es miembro de la Alianza CKYHE y CSCL lo es de Ocean Three.
Teniendo en cuenta que ningún organismo regulador permitiría a una colaboración entre empresas controlar el 40% del mercado, lo que pasaría si se unieran las dos alianzas, lo más probable es que los operadores chinos rompan sus actuales contratos de cooperaciónsi se fusionan.