Los incrementos de capacidad y las caídas en las omisiones de servicio indican que las navieras tienen buenas perspectivas para lo que resta de temporada alta en el transporte mundial de contenedores.
Tras el empeoramiento de abril, las navieras han conseguido ajustar mejor sus servicios al calendario programado en mayo, aunque, sin embargo, también aumentan los retrasos medios en las escalas.
Tras un primer trimestre de ajuste en la fiabilidad en los servicios, en abril se ha revertido la tendencia y las navieras han perdido capacidad para adaptar sus rutas a los tiempos estimados.
A lo largo del pasado mes de marzo, las navieras parece que han conseguido adaptarse a la alteración de flujos que supone la crisis bélica en el mar Rojo y están recuperando la fiabilidad en sus principales servicios.
Las navieras se focalizan en aprovechar los niveles actuales de los fletes, especialmente en el segmento spot, y el cierto repunte de la demanda, más que en subir tarifas., mientras consolidan la tendencia a la baja en sus omisiones de servicio.
La crisis del mar Rojo ha afectado significativamente a la capacidad en las rutas que cruzan el Pacífico, y bastante menos a las establecidas entre Asia y Europa.
El desvío de las rutas por el conflicto bélico en el Mar Rojo implicará viajes más largos y velocidades más altas, con un mayor consumo de combustible que se reflejará inevitablemente en los fletes.