La pausa en la guerra arancelaria entre China y los Estados Unidos ha provocado un fuerte repunte de la demanda de productos de importación desde Asia, en la medida en que las principales empresas norteamericanas pugnan por aprovisionarse antes de que se introduzcan nuevos aranceles.
En este sentido, Sea Intelligence calcula que la capacidad en las líneas entre Asia y la costa oeste norteamericana ha aumentado en 397.000 TEUs en las últimas dos semanas.
De manera particular, la consultora estima que la capacidad en estas rutas que cruzan el Pacífico se ha incrementado en un 12.8% este mes de junio y que volverá a crecer otro 16.5% el próximo julio.
Esta tendencia al alza en las importaciones podría generar problemas de congestión portuaria en los recintos de Los Ángeles y de Long Beach, a la vista de que sus previsiones indican que en julio se podrían sobrepasar los volúmenes que absorbieron ambas radas en el momento álgido de la pandemia de covid-19 en 2021.