Comisiones Obreras dice valorar "positivamente el acuerdo alcanzado entre el Gobierno y el Comité Nacional del Transporte por Carretera si resuelve la situación coyuntural", aunque lo considera una “factura para intentar parar un conflicto que no perjudique la actividad económica de país y deje de secuestrar a la ciudadanía".
De igual manera, el sindicato asevera que este acuerdo "subvenciona de manera arbitraria al sector en general sin discriminar necesidades en las ayudas directas”, al tiempo que defiende que "la lluvia de millones a los empresarios del sector debería ir acompañada de medidas que implicaran y obligasen a los empresarios que las reciben a demostrar la necesidad y a cumplir socialmente con la cadena de contratación por debajo de ellos y con su personal asalariado".
Por ello, la central sindical llama a "exigir el cumplimiento de los convenios colectivos, evitar y perseguir el fraude generalizado en dietas, el no pago de todas las horas trabajadas, el fraude con respecto al trabajador autónomo dependiente, etc.”.
"Abocados a movilizaciones"
Así mismo, Comisiones Obreras insiste en la creación de una mesa social del transporte, ya que, a su juicio, "la solución requiere tratar de manera integral los problemas de toda la cadena de distribución y no solo los de las empresas", al tiempo que asegura que "si no se nos escucha y se abre una mesa para resolver las cuestiones sociales y laborales de los trabajadores del sector nos veremos abocados a movilizaciones".
La central sindical cree que "el sector del transporte se ha degradado en un proceso de deslaboralización y atomización del sector, donde miles de personas autónomas y pequeñas empresas sufren la falta de poder de negociación frente a los grandes distribuidores, así como la escalada de los precios de los hidrocarburos determinados por un reducido número de empresas oligopolistas”.
Para el sindicato, "el compromiso de presentar un proyecto de ley para aplicar al sector del transporte de mercancías por carretera los principios de la Ley de la Cadena de Alimentaria es una oportunidad para reestructurar un sector regido por las normas del neoliberalismo más salvaje, que como siempre, debe ser rescatado con dinero público".
Comisiones Obreras dice no descartar la convocatoria de huelga "si no se abordan soluciones en el marco del diálogo social”.