Actualmente, Deutsche Bahn se encuentra inmersa en un programa de ajuste, tras haber perdido 1.300 millones de euros en 2015.
Deutsche Bahn, el operador público de ferrocarril de Alemania, ha confirmado la salida a petición propia y "con efecto inmediato" de su presidente, Rüdiger Grube.
La dimisión se ha producido por un grave desacuerdo dentro de la negociación de la renovación de contrato del antiguo presidente de la compañía, según recoge el diario alemán Der Spiegel.
El contrato de Grube concluía a finales de año y, según recoge el medio alemán, el directivo quería renovar por tres años más a cambio de acceder a no percibir un aumento salarial, una propuesta que desde el consejo de supervisión de la compañía han denegado ofreciéndole sólo dos años más.
Esta información, no obstante, no ha sido confirmada por la compañía, que designará en breve a un sucesor. Asimismo, desde la empresa han declarado que el Consejo de Seguridad ha asumido por unanimidad la petición de Grube, y se ha mostrado dispuesta a finalizar el contrato actual y solicitar al departamento de personal que cierre los detalles de la salida.
La empresa, además, ha agradecido la labor desempeñada por Grube durante los ocho años en los que ha permanecido en la presidencia. Actualmente, Deutsche Bahn, cuyas acciones están en manos del gobierno alemán, se encuentra inmersa en un programa de ajuste, tras haber perdido 1.300 millones de euros en 2015.