“Los impuestos de los ciudadanos no pueden dedicarse a pagar las pérdidas de los peajes privados mal diseñados por los gobiernos del PP”. Así lo ha expresado el portavoz de Fomento del Grupo Parlamentario Socialista, Rafael Simancas.
El portavoz ha explicado que el problema de los peajes quebrados se inicia con una planificación deficiente por parte del Gobierno Aznar-Cascos. “Los peajes están mal diseñados, los tráficos previstos están sobrevalorados y los costes de expropiación fueron mal calculados”, ha resaltado.
Según ha expresado Simancas, el Gobierno socialista inició una salida razonable mediante la reconversión de las empresas concesionarias, conformando paquetes concesionales viables. Sin embargo, el Gobierno Rajoy-Pastor interrumpió este proceso y dejó quebrar hasta diez concesiones.
“Tras ensayar y desechar varias salidas, por la negativa de los actores en juego o por el riesgo de aumentar el déficit público, el Gobierno plantea ahora crear una empresa pública que rescate las concesiones con recursos procedentes de los impuestos de los ciudadanos”, ha indicado.
El grupo socialista se opone frontalmente a dedicar un solo euro de los recursos públicos para socializar las pérdidas de las concesionarias de los peajes, ya que "si no se compartieron las ganancias, ahora no hemos de compartir las pérdidas".
El PSOE ha solicitado la comparecencia urgente de la Ministra de Fomento ante la Comisión correspondiente del Congreso para exigir explicaciones sobre sus planes, para reiterarle su oposición al empleo de dinero público en los rescates de peajes privados y para proponer su alternativa.
La reconversión empresarial viable del PSOE
En opinión del grupo socialista, el Gobierno solo plantea dos opciones a los ciudadanos, pagar la mitad del rescate o pagarlo todo. Simancas defiende una tercera opción planteada como una reconversión en el sector de las concesiones en autopistas de peaje, negociando ‘paquetes’ con concesiones más rentables que compensen a las menos viables.