El puerto de Algeciras reivindica políticas europeas que no lastren la competitividad de los puertos

En referencia a la próxima entrada en vigor del Sistema de Comercio de Derechos de Emisión, señaló que las políticas europeas deben desarrollarse “con coherencia y sin distorsionar el mercado”.

Jueves, 08/06/2023 por CdS

El encuentro ha reunido a los responsables de los principales puertos, y representantes y expertos del sector en Europa.

El presidente de la Autoridad Portuaria de Algeciras, Gerardo Landaluce, ha destacado la importancia de los puertos como hubs energéticos en el futuro durante su intervención en la XIX Conferencia anual de ESPO en Bremen.

El encuentro ha reunido a los responsables de los principales puertos, y representantes y expertos del sector en Europa, para debatir sobre los desafíos climáticos para las operaciones portuarias y las cadenas logísticas, la transición verde y las nuevas energías o las políticas en las que trabaja la UE, como el ‘Fit for 55’, ‘The Green Deal’ o ‘REpower EU’.

El presidente del puerto de Algeciras señaló que la colaboración público-privada y el apoyo institucional son fundamentales para el desarrollo de proyectos como el Valle Andaluz del Hidrógeno Verde, que recibirá próximamente la visita de los reyes de España y Países Bajos para mostrar su apoyo al Corredor Marítimo de Hidrógeno Verde entre el norte y Sur de Europa.

Así, para que los puertos puedan seguir cumpliendo un papel relevante en el proceso de descarbonización, Landaluce resaltó que las políticas europeas deben desarrollarse “con coherencia y sin distorsionar el mercado”, en referencia a la próxima entrada en vigor del Sistema de Comercio de Derechos de Emisión.

Es fundamental escuchar al sector para no comprometer la estrategia europea de los puertos a largo plazo”, entiende Landaluce, ya que los puertos son herramientas al servicio de la sociedad y han de utilizarse para desarrollar estrategias a nivel global en respuesta a otras iniciativas internacionales.

En este sentido, insistió en que “es fundamental controlar la cadena de suministro si Europa quiere ser autosuficiente y no aplicar legislaciones, como el ETS, que pueden acabar cediendo a terceros países ese control y creando una dependencia estratégica de países con intereses distintos a los europeos”.