El puerto de Cartagena afronta la construcción de un nuevo puesto de control fronterizo

El edificio se levantará en el muelle de Santa Lucía y tendrá una superficie de 3.209,46 m², y permitirá agilizar toda la actividad de control de mercancías, así como la zona administrativa.

15/05/2023 a las 22:22 h

El puerto de Cartagena acometerá en breve las obras de construcción de un nuevo puesto de control fronterizo, con el objetivo de centralizar todas las actividades de control de mercancías y la zona administrativa en un solo edificio en la dársena de Cartagena.

El edificio, que tendrá una superficie de 3.209,46 m² distribuidos en dos alturas, se construirá en el muelle de Santa Lucía con una inversión de 6,1 millones de euros. La Autoridad Portuaria espera que esta instalación más moderna y eficiente libere espacio y mejore las instalaciones portuarias, además de cumplir con las solicitudes europeas de un mayor control fronterizo.

Desde el puerto de Cartagena se ha recordado que este amarre es uno de los líderes en exportaciones de ganado vivo y el primer puerto importador de España, de ahí que la actividad portuaria requiere infraestructuras que agilicen el movimiento de mercancías y concentren los servicios de control e inspección, como Sanidad Animal, Sanidad Vegetal, Sanidad Exterior, Soivre (Servicio Oficial de Inspección, Vigilancia y Regulación del Comercio Exterior) y Aduanas.

Según las autoridades, la mejora de este puesto de control "y la eficiencia de sus trabajadores" aumentarán la seguridad alimentaria, ganadera y aduanera, lo que beneficiará a las empresas agroalimentarias de la Región.

La UTE, compuesta por ASCH Infraestructuras y Servicios y SBA Infraestructuras, ha sido adjudicataria de las obras, que tienen un plazo de ejecución de un año y medio. Mientras tanto, el actual puesto de control fronterizo de Santa Lucía seguirá funcionando sin interrupciones.

Los puestos de control fronterizos centralizan los controles oficiales de productos procedentes del comercio exterior e interior y se encargan de controlar que las mercancías importadas cumplan con las garantías necesarias para prevenir riesgos sanitarios y fitosanitarios. Realizan inspecciones especializadas en productos para consumo humano, productos farmacéuticos, animales vivos y productos que puedan afectar la sanidad animal, así como posibles plagas que puedan afectar los productos vegetales.

 

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