A partir del 1 de noviembre, será obligatorio el uso de la nueva etiqueta de neumático para camiones pesados fabricados después del 1 de julio de 2012 y vendidos en la UE, que contenga información sobre su resistencia, frenado sobre mojado y ruido extremo.
Por lo tanto, se espera que esto influya en los operadores de flotas de vehículos comerciales que valorarán este aspecto a la hora de adquirir sus neumáticos.
En este sentido, Goodyear Dunlop afirma que el etiquetado del neumático desempeñará un papel fundamental en mejorar la eficiencia en el consumo de combustible en Europa.
En un estudio realizado por la empresa, los resultados demostraron que sólo el 40% de los operadores compraron neumáticos eficientes en combustible para sus vehículos.
Esto implica que más de la mitad de las flotas de vehículos comerciales en Europa están consumiendo combustible innecesariamente y, por lo tanto, perdiendo la oportunidad de reducir sus costes operativos.
Goodyear entiende que el etiquetado concienciará a los operadores sobre la importancia de los neumáticos con respecto a la eficiencia en el consumo de combustible y ayudará a reducir no sólo los costes operativos a través de la elección del neumático sino también las emisiones de CO2.
Particularmente eficiente en combustible es la gama de neumáticos Marathon Long Haul que ha sido recientemente mejorada con la introducción de los neumáticos de dirección LHS II + y de tracción LHD II +. Estos neumáticos destacan en las pruebas comparativas en relación tanto a la economía de combustible como al frenado sobre mojado.
Driving Fleet fuel efficiency: The Road to 2020
El estudio de Goodyear Dunlop formó parte de la campaña europea sobre eficiencia de combustible lanzada en un symposium que tuvo lugar en Bruselas en el mes de enero.
La empresa organizó este symposium para abrir un debate más amplio sobre la creciente demanda respecto a la eficiencia de combustible por parte del sector europeo de transporte de carga por carretera.
La nueva etiqueta solo cubre tres áreas, por lo que no refleja bien otras prestaciones de los neumáticos. “Goodyear Dunlop analiza 50 criterios diferentes que no se reflejan en la etiqueta incluidos el manejo en seco y sobre mojado, la presión de contacto en la huella, las altas velocidades, la durabilidad, la tracción y el kilometraje”, ha señalado.
Etiquetado de neumáticos
• En la esquina superior izquierda de la etiqueta aparece un neumático junto a un surtidor de gasolina.
Esta sección indica la eficiencia de combustible, que viene determinada por una medición del coeficiente de resistencia a la rodadura.
Debajo hay una serie de barras de colores señalizadas de la A a la G y con una gama de colores que va del verde al rojo.
La A representa la mayor eficiencia y la F la menor. Cuanto menor sea la resistencia a la rodadura de un neumático, menos energía necesitará, por lo tanto el vehículo consumirá menos combustible y, en consecuencia, se reducirán sus emisiones de CO2.
• La columna de la derecha muestra un neumático junto a una nube con lluvia.
Este dibujo marca el agarre sobre mojado, que está relacionado con la seguridad. Debajo aparece una escala de la A a la G, con el mismo valor que el anterior.
Cuanto mejor sea la clasificación, menor es la distancia de frenado sobre superficies mojadas.
• En la parte inferior figura un símbolo compuesto por un neumático y un altavoz del que surgen tres ondas.
El número de ondas negras indica el nivel de ruido que emite el neumático. Tres ondas negras significan que el neumático cumple con el límite legal actual . Dos ondas negras implican que se encuentra hasta tres decibelios por debajo del límite que se impondrá en el futuro y una onda que se encuentra más de tres decibelios por debajo.
Las etiquetas no tienen que estar adheridas a los neumáticos de camión pesado, como es el caso en los neumáticos para turismo. Sin embargo, la información debe aparecer en el material promocional, incluso en Internet, y debe constar en la factura cuando se vende un neumático.
Los fabricantes de neumáticos tienen la responsabilidad de evaluar los neumáticos en las tres áreas. No obstante, se ha previsto un sistema que permite a las autoridades nacionales y locales verificar que la información de la etiqueta es correcta en base a un proceso de verificación contenido en el reglamento. Los Estados Miembros decidirán de forma individual las penalizaciones en caso de incumplimiento.
Métodos de evaluación para la clasificación de las etiquetas
La resistencia a la rodadura se mide en un laboratorio a 25ºC. El neumático se monta en una máquina, que tiene un gran tambor rotatorio para simular el rodaje de un neumático sobre la carretera. El neumático y el tambor rotatorio se ponen en contacto.
La diferencia entre los pares medidos en el neumático y en el tambor da como resultado el coeficiente de resistencia a la rodadura, que se mide en kilogramos por tonelada.
La evaluación del agarre sobre mojado puede llevarse a cabo usando uno de dos métodos posibles, ambos realizados en un circuito de pruebas.
El primero es la Prueba de Frenado sobre Mojado del Vehículo. Esta prueba mide la eficacia a la hora de frenar de 60 km/h a 20 km/h en la superficie mojada de una carretera, especificada en el reglamento.
El segundo método es la Prueba del Patín a Remolque, que mide la fricción entre el neumático y la superficie mojada de una carretera a 50 km/h. La cifra resultante se llama Índice de Agarre sobre Mojado y se relaciona con el rendimiento obtenido comparado con el de un neumático de referencia preestablecido.
La evaluación del nivel de ruido también se realiza en un circuito de pruebas y se basa en una prueba ISO de ruido. Se sitúan dos micrófonos a 7,5 m en una línea central a una altura de 1,2 m. El camión pasa los micrófonos y se mide el nivel de sonido en decibelios. En función del nivel obtenido, se establece una calificación de una, dos o tres ondas.