El recinto pontevedrés da el primer paso de cara a prepararse para acoger barcos más grandes y aumentar sus tráficos, por lo que estudia aumentar el calado de sus instalaciones hasta los 11,5 metros de profundidad.
Con estos trabajos, el puerto gallego busca adecentar estas instalaciones con el fin de que puedan acoger diversas actividades portuarias en concesión.
El recinto pontevedrés quiere prepararse para acoger barcos más grandes y aumentar sus tráficos, por lo que estudia aumentar el calado de sus instalaciones hasta los 11,5 metros de profundidad.
El notable crecimiento de los graneles líquidos mantienen la tendencia al alza del puerto gallego, con aumentos en dobles dígitos en los tráficos de cemento y cuarzo.
Desde el puerto han realizado un gran esfuerzo económico y técnico para poder contar con un trazado ferroviario moderno, eficiente y que da servicio a todos sus muelles.
El mayor volumen corresponde a la mercancía general, con 152.263 toneladas que suponen un incremento del 8,9%, aunque porcentualmente, destacan los graneles sólidos, que han crecido un 34,2%.
Tanto en enero como en febrero se han superado las 100.000 toneladas mensuales, y todo apunta a que en marzo se superarán también los registros de 2018, tanto en el acumulado como a nivel mensual.
La Autoridad Portuaria de Vilagarcía de Arosa defiende el papel de los puertos pequeños como dinamizadores de la actividad económica en sus zonas de influencia.