Rosa Aza ha considerado el cambio como "algo normal", ha agradecido al personal portuario su fidelidad y ha ofrecido "colaboración" al nuevo presidente.
Entre otras actuaciones, el puerto restringirá el tráfico terrestre en la zona que ha propiciado, junto a las condiciones climatológicas adversas, que las nubes de carbón llegue a la población de Gijón.
En un primer momento, el Consejo de Ministros debería autorizar el proceso de enajenación de acciones para que, posteriormente, sean licitadas y adjudicadas a una serie de empresas que deben cumplir los requisitos del Pliego de Condiciones Particulares.
A mediados del 2014, podría salir en concurso el 68,8% de la participación que tiene la Autoridad Portuaria de Gijón en la principal terminal de el Musel, aunque antes tendrá que pasar por varios organismos para establecer los criterios y corregir el cuaderno de venta.
Existen dos tasaciones distintas de la terminal, una encargada por la Autoridad Portuaria de Gijón a la empresa Tinsa y otra efectuada por Ibertasa-Galtier a instancia de EBJISA, que establecieron en 2011 el valor material de las instalaciones en 40,7 y 19,5 millones de euros, respectivamente.