Entre enero y agosto, se han movido en el recinto portuario 23,2 millones de toneladas, lo que supone un incremento del 10,7%, gracias al buen comportamiento de la mercancía general.
A lo largo de los siete primeros meses de 2019, mientras que el movimiento portuario de graneles sólidos sigue avanzando con buen ritmo, el de líquidos pierde un 9% con respecto al mismo tramo de 2018.
Caídas en los tráficos de graneles, especialmente en el de sólidos, que llevan los cómputos acumulados en los cuatro primeros meses de 2019 a cifras negativas.
La concesión de la multinacional neerlandesa para tráfico de graneles líquidos pasa de este modo a regirse por un único pliego de condiciones unificado.
En marzo, mientras que el tráfico de graneles líquidos ha crecido, el de sólidos ha descendido con fuerza, aunque en el cómputo acumulado durante el primer trimestre del año ambas mercancías presentan aumentos anuales.