El proyecto se enmarca dentro de las labores de dragados periódicos de la ría del Guadalquivir que realiza la Autoridad Portuaria de Sevilla periódicamente.
Mientras el puerto de Sevilla defiende los beneficios ambientales y económicos del proyecto, la Unesco solicita un "compromiso firme" del Gobierno para cancelarlo.
Los impulsores del dragado esperan mejorar el proyecto a partir de las alegaciones presentadas al Plan Hidrológico, con el fin de obtener el visto bueno del Supremo.
Mientras desde la asociación esperan dejar el DIA "fuera de juego", los defensores del dragado afirman que el proyecto sigue vivo, ya que el Supremo sólo rechaza un error de forma.
El alto tribunal concluye que no se han explicado de forma "específica" los motivos por los que se realiza esa obra que "ocasionará modificaciones o alteraciones" en Doñana.
De no llevarse a cabo antes de junio, el proyecto de dragado en el río Guadalquivir, vital para que buques más grandes lleguen al puerto de Sevilla, perderá los fondos Feder destinados al mismo.
A pesar de que se declara "respetuoso" con todos los colectivos, desde el sindicato se recuerda que la Audiencia Nacional ha dado la razón a la Autoridad Portuaria de Sevilla.
Los informes científicos marcan la "escasa" incidencia que tendrá el dragado en la salinidad y en los niveles de turbidez, según ha asegurado la presidenta del ente portuario.