Sánchez ha recordado que las matriculaciones de vehículos eléctricos ya suponen más del 10% del total, y que en menos de un año España tendrá más de 1.000 puntos de recarga.
El Gobierno pone en marcha un plan de ayudas para electrificar vehículos ligeros que deja fuera de facto a la mayor parte de los transportistas, al exigir una flota mínima de 25 unidades.
La Cámara de Comercio pide facilidades en la adaptación del transporte a la Zona de Bajas Emisiones de Barcelona, para que los empresarios puedan contar con alternativas que les permitan trabajar y amortizar su inversión.
Raquel Sánchez ha destacado el impacto de las propuestas del 'Fit for 55' para el desarrollo de las infraestructuras de recarga.
Faconauto espera que las Comunidades Autónomas que todavía no han implementado las ayudas lo hagan antes del 14 julio.
El Moves III está dirigido exclusivamente a la compra de vehículos eléctricos, por lo que los transportistas que quieran acogerse a dichas ayudas deberán solicitar los Fondos que aún queden sin ejecutar del Programa Moves II.
La compra de furgonetas eléctricas se subvencionará con hasta 9.000 euros en caso de que el usuario achatarre su viejo vehículo y con hasta 7.000 si no lo hace.
En el momento actual, es preciso utilizar todas las tecnologías de bajas emisiones disponibles para alcanzar los objetivos de descarbonización.
El presupuesto del Plan Moves II se ampliará para la Comunidad de Madrid, Cataluña, la Comunidad Valenciana, Aragón y Navarra.
Desde la patronal, reclaman la activación del Plan de Impulso de la Cadena de Valor de la Industria de la Automoción.
El plan estará dotado con 400 millones, aunque la cifra podría duplicarse si existe capacidad suficiente para absorber estos recursos.
Desde Transport & Environment, han aprovechado para solicitar la prohibición de los motores de gas en las zonas de bajas emisiones.
La existencia de dos líneas de ayudas para la compra de vehículos obliga a los interesados a tener que valorar qué les interesa más.
Una sentencia del Tribunal Supremo estima acorde a Derecho la exclusión de vehículos ligeros de gas en la concesión de ayudas públicas en 2019.
El 50% del presupuesto se destinará a impulsar la compra de vehículos de energías alternativas, mientras que un 45% irá dirigido a las infraestructuras de recarga.
Eliminar de las ayudas los motores de combustión no permitirá que las rentas más bajas puedan acceder a los vehículos más eficientes.
El Gobierno sigue considerando prioritaria la transición energética en España y apuesta por ir sustituyendo los vehículos diésel con ayudas públicas.