Nuevas transacciones sobre naves de gran tamaño en Alemania y Polonia muestran que el interés de los grandes inversores por activos logísticos sige intacto.
El país se suma a Finlandia, Rumanía, Bielorrusia y Tayikistán como impulsor en el uso de la carta de porte electrónica, con el fin de ganar agilidad, eficiencia y transparencia en su transporte por carretera.