Esta iniciativa, proporcionaría a los puertos portugueses una mejor salida para sus mercancías hacia el interior de la Península Ibérica, y al resto de Europa.
La estiba se paraliza en el puerto holandés de Rotterdam mientras los estibadores y empleadores de Lisboa no alcanzan un acuerdo para el convenio colectivo.
El movimiento de mercancías entre puertos nacionales ha mostrado un incremento del 7,3%, contabilizando 2,9 millones de toneladas, mientras que el tráfico internacional ha alcanzado los 15,7 millones de toneladas, un 4,8% más.