Cada vez se realizan más simulacros de emergencias y de lucha contra la contaminación en el puerto, con el fin de elevar al máximo los niveles de seguridad.
Las autoridades aduaneras europeas dispondrán de información acerca de los movimientos del buque a través del proyecto Blue Belt, todavía en fase piloto, pero que podría estar operativo a principios de 2012, siempre que los resultados obtenidos sean positivos.