Desde los sindicatos, reunidos en una protesta colectiva el pasado 13 de octubre en Barcelona, han reiterado que las causas económicas "no están suficientemente justificadas", y que las organizativas "ponen en riesgo la seguridad de las operaciones".
La compañía ha concluido la primera fase de adecuación de su apartadero ferroviario en el Muelle de la Energía del puerto de Barcelona, con el fin de poder operar con contenedores cisterna.