Las labores de estiba y desestiba de los vehículos terminados en cada modo de transporte son momentos críticos en la logística de automoción.
Pese a la alta especialización del personal que las lleva a cabo y de los protocolos desarrollados al efecto, la patronal europea ECG estima que uno de cada diez incidentes en este segmento se produce en labores de estiba en los concesionarios.
Según la entidad, esta cifra permite anticipar que existe un amplio campo de mejora en estas prácticas para reducir los daños que se producen a la carga, así como al propio personal y a los vehículos.
Con más detalle, los accidentes más frecuentes incluyen deslizamientos y caídas, a veces desde el segundo nivel de carga de los portacoches.
En este sentido, los incidentes más graves casi siempre son las caídas desde altura, de tal manera que, de acuerdo con los reegistros de ECG, los accidentes durante las desestibas ocurren cuando el automóvil no está asegurado en la plataforma del camión y el freno de mano no está correctamente puesto.
Esta circunstancia puede hacer que el vehículo salga descontrolado del semirremolque con la posibilidad de provocar un accidente grave en su entorno.
