La combinación de una demanda de transporte en crecimiento, la disponibilidad limitada de capacidad y la aceleración de las políticas medioambientales está llevando al sector del transporte a priorizar herramientas digitales, una mayor visibilidad operativa y modelos logísticos más eficientes.
Esta tendencia será clave en 2026, según un reciente análisis de Cargoboard, que explica que las solicitudes de transporte gestionadas a través de su plataforma han aumentado un 18% en 2025. Esto supone que cada vez más empresas recurren a soluciones digitales para asegurar capacidad y ganar control sobre su operativa logística.
La planificación anticipada de los envíos, la optimización de rutas y la gestión inteligente de la capacidad se han convertido en elementos críticos para las cadenas de suministro, lo que obliga a las compañías a apoyarse en datos en tiempo real y en plataformas digitales que faciliten la toma de decisiones, permitan reaccionar rápido ante incidencias y aporten una visibilidad integral de su operativa.
La carretera es un modo de transporte clave para el comercio intracomunitario y la actividad industrial. Sin embargo, factores como la escasez de conductores se están convirtiendo en un auténtico cuello de botella, pues más de la mitad de las empresas de transporte en Europa declara tener dificultades para expandirse por falta de profesionales.
A ello se suma las nuevas regulaciones ambientales, que están llevando a las empresas a evaluar con mayor precisión la huella de carbono de sus operaciones y a buscar proveedores que ofrezcan opciones más sostenibles. La eficiencia energética, la optimización de rutas y la capacidad de medir y compensar emisiones son ya criterios habituales a la hora de seleccionar socios logísticos.
Crecimiento de Cargoboard
En este escenario, Cargoboard ha alcanzado los 100.000 clientes en Europa en 2025 y supera los 330.000 envíos gestionados en lo que va de año. Su plataforma, diseñada para simplificar la operativa logística y aportar transparencia, responde a muchas de las necesidades que marcan las nuevas dinámicas del sector.
Su intención en este sentido es combinar la eficiencia operativa con un compromiso real con el impacto ambiental. Así, solo en el primer semestre de 2025, impulsó cerca de 80.000 envíos sostenibles, compensando aproximadamente 3.450 toneladas de CO₂e y destinando 56.925 euros a proyectos certificados de protección ambiental.