Un estudio elaborado por la Unversidad Rovira i Virgili constata que el tráfico de camiones ha aumentado un 50% en el tramo de la AP-7 que transcurre por la provincia de Tarragona desde que se liberalizara hace tres años.
De manera particular, el informe apunta que el tráfico de camiones en el sur de Cataluña creció un 49,74%, en Barcelona solo lo hizo un 10,75% y en eirona, un 25,60%.
Con todo ello, según este documento, la vía sufre una "situación crítica” que requiere una respuesta urgente, como consecuencia de que lo denomina ”las trabas de los diferentes gobiernos españoles para apostar decididamente por el corredor ferroviario mediterráneo”, algo que “evidencia las limitaciones del sistema de movilidad español para ofrecer alternativas basadas en el transporte por tren y barco más sostenible a largo plazo”.
En diefinitiva, el trabajo apunta "la voluntad insuficiente mostrada hasta ahora por el Estado para resolver una situación en peligro de convertirse en crónica" para una vía que canaliza el tráfico exterior del arco mediterráneo hacia Europa.
Entre las soluciones propuestas para descongestionar la vía destaca la ampliación de la capacidad de la vía construyendo más carriles en los tramos más congestionados, mejorar los accesos a la autopista, regular la velocidad en función de las condiciones viarias y meteorológicas, reducir la velocidad en los tramos más congestionados hasta los 60 km/h, aplicar un sistema de velocidad variable entre Maçanet de la Selva y el Vendrell, agilizar la gestión de los accidentes y la retirada de vehículos, ofrecer información en tiempo real a los conductores sobre el estado del tráfico, gestionar mejor el paso de los vehículos pesados, instalar más cámaras y radares de tramo para detectar infractores y, incluso, aplicar algoritmos y herramientas de inteligencia artificial para regular mejor el tráfico.
