Esta semana se ha restablecido el tráfico en toda la línea Zaragoza-Huesca-Canfranc tras la finalización de las obras que ha desarrollado Adif para la renovación integral de esta infraestructura.
En total, la inversión supera los 180 millones de euros con actuaciones que se han concentrado en los tramos Ayerbe-Caldearenas y Jaca-Canfranc, con una longitud total de 61 kilómetros.
Así mismo, se está trabajando en nuevas instalaciones de gestión del tráfico con enclavamientos electrónicos, bloqueos de liberación automática y telecomunicaciones con tecnología GSM-R. Todo ello redunda en un incremento de la fiabilidad, disponibilidad y funcionalidad de esta infraestructura, y permite optimizar las labores de mantenimiento.
Las obras han permitido modernizar tanto la vía como el trazado, mejorando los radios de curva para alcanzar una velocidad sostenida en una zona montañosa y con gran cantidad de túneles y puentes metálicos.
Con más detalle, entre las principales actuaciones realizadas, destacan la consolidación y protección de terraplenes y taludes, contribuyendo a prevenir deslizamientos y erosiones, el refuerzo estructural e impermeabilización de 29 túneles (28 ampliando el gálibo y rebaje de plataforma de vía en uno), además de la limpieza de su revestimiento y drenaje, modificaciones de eje del trazado en algunas curvas, un nuevo tratamiento de pintura protectora en cuatro puentes metálicos, la renovación del tablero de dos pasos inferiores y la ejecución de un nuevo paso superior, así como la instalación de protecciones antivandálicas en 14 pasos superiores y la mejora y adecuación del drenaje transversal y longitudinal, añadiendo 35 nuevas obras de drenaje.
Adicionalmente, se han recrecido los andenes para mejorar la accesibilidad en las estaciones de Riglos-Concilio, Santa María-La Peña, donde también se ha ampliado la vía de apartado a 750 metros, Castiello-Pueblo, Villanúa-Letranz y Jaca.