Se efectuarán a través de la naviera Aida y el buque híbrido AIDAperla, con capacidad para más de 4.000 personas y con un funcionamiento cero emisiones durante el atraque en los puertos.
La presidenta confía en que también pueda reactivarse la actividad de los cruceros internacionales en modo piloto si reciben la autorización necesaria.
Entre las medidas propuestas para la reanudación, se exigirá a la tripulación de los barcos contar con tres pruebas PCR negativas antes de embarcar, y una a los cruceristas.
Desde la Autoridad Portuaria, se está trabajando de forma coordinada junto a navieras, tour operadores, mercados emisores e instituciones públicas en un 'turismo seguro'.
Las conferencias abordarán la figura del nuevo crucerista, incidiendo en la digitalización de experiencias y el modo en que interactúan puertos y destinos.