Para fortalecer el papel del puerto de Hamburgo como hub de suministro para Alemania, las infraestructuras deben adaptarse y optimizarse continuamente. En este sentido, a partir del Plan de Desarrollo Portuario del Senado y un acuerdo del Gobierno de Hamburgo, se han programado una serie de inversiones que ascienden a unos 1.100 millones de euros, cubiertos en parte por financiación pública, para realizar diversas obras que la Autoridad Portuaria completará a mediados de la década de 2030.
Así, por ejemplo, se mejorará el acceso del río Elba al Waltershofer Hafen y se crearán nuevos patios de terminales. De este modo, la navegación hacia las terminales de contenedores de Burchardkai (CTB) y Hamburgo (CTH) será más fácil y rápida, mientras que los nuevos terrenos crearán capacidad adicional y contribuirán a la modernización de las operaciones de tráfico de contenedores.
Las futuras terminales seguirán siendo de propiedad pública y serán arrendadas a Eurogate por la Autoridad Portuaria en condiciones de mercado. Estas áreas ampliarán la actual Terminal de Contenedores de Hamburgo (CTH) y se integrarán plenamente en la red vial y ferroviaria.
Como espacio operativo contiguo, el emplazamiento permitirá una gestión eficiente y sostenible, con un concepto operativo en el que los contenedores se desplazarán mediante vehículos eléctricos de guiado autónomo. Esto supone un paso importante hacia la neutralidad climática en 2040.
Una vez que la Autoridad Portuaria haya completado el desarrollo del terreno, Eurogate se encargará de aplicar el concepto operativo y de innovación. Además, el arrandatario invertirá al menos 700 millones de euros en la ampliación de la terminal de contenedores existente, cuya finalización está prevista dentro de los dos años siguientes a la entrega del terreno recientemente desarrollado.
Cabe apuntar que alrededor del 90% de los buques portacontenedores más grandes que hacen escala en Hamburgo se manipulan actualmente en el Waltershofer Hafen, donde la dársena de giro se ampliará de los 480 metros actuales a los 600 metros. Los buques dispondrán así de una mayor superficie de agua para las maniobras, lo que garantizará un rendimiento y una seguridad óptimos.
El objetivo es mejorar la seguridad de la navegación y la eficiencia operativa para los tamaños de buques actuales y futuros en la zona de mayor tráfico de contenedores de Hamburgo, al tiempo que se mejorará la navegabilidad y la resistencia a lo largo del río Elba.
Todos los puntos de atraque del Waltershofer Hafen se beneficiarán de esta medida, que se espera que aumente la eficiencia del tráfico. La creación de puntos de atraque adicionales también mejorará los flujos de trabajo de la terminal, donde en el futuro, los procesos podrán automatizarse y electrificarse.
Las autoridades ya han aprobado los planes y, tras la desestimación de todos los recursos judiciales, puede procederse a la construcción de la infraestructura pública. Dado que está previsto que cuente con financiación pública, se requiere la aprobación de la Comisión Europea, un proceso que puede durar varios años.