Desde 2022 para acá se viene notando un fenómeno ciertamente curioso en relación con el empleo de los conductores profesionales de camión.
En los últimos años se ha hecho cada vez más evidente la escasez de conductores, un fenómeno que no es exclusivo de España, ni siquiera del sector del transporte de mercancías por carretera. La situación tiene mucho que ver con las cada vez más envejecidas pirámides de población que tienen los países más desarrollados y que abocan a una falta de relevo, dada la menor población joven, en comparación con los grupos de edad más avanzada, más numerosos.
[sumario]Grosso modo, los ciudadanos extranjeros suponen casi un cuarto de todos los contratos de trabajo que se suscriben en España para conductores de camión”.[/sumario]
Así pues, ante una tendencia tan asentada, podría resultar sorprendente que, en un contexto de escasez de profesionales, se venga reduciendo la contratación en este colectivo. Sin embargo, mirándolo desde otra perspectiva, quizás sea esta misma situación de falta de chóferes la que esté obligando, junto con otras de índole económica, a las empresas de transporte a contener la contratación de los conductores.
Un dato que corroboraría esta hipótesis es la constante reducción que, en paralelo, se viene registrando en los tres últimos años en el número de chóferes de camión en paro.
Qué dicen los datos oficiales
Según las estadísticas oficiales, el volumen total de contrataciones laborales para chóferes suma 250.611, un 1,96% menos que en 2021.
De esa cifra global, 234.716 contratos han sido para conductores de camión asalariados, una cifra que también es un 2,75% inferior a la de un año antes.
Sin embargo, los contratos de trabajo para chóferes autónomosse han incrementado un 11,41% entre 2021 y 2022 hasta sumar un total anual el pasado ejercicio de 15.895.
Al mismo tiempo, 2022 ha terminado con 25.259 demandantes de empleo como conductores autónomos a fecha de 31 de diciembre, un 9,47% menos que un año antes y con 1.150 demandantes de empleo como chóferes autónomos, un 4% menos que a finales de 2021.
Teniendo en cuenta los últimos datos, correspondientes al período que va enero a mayo de 2023, la contratación de conductores de camión se ha reducido un 18,43%con respecto a los cinco primeros meses del año pasado.
Contrastan, como en los registros de 2022, las diferencias entre asalariados y autónomos.Así pues, mientras que el número de contratos de trabajo para los primeros ha caído un 21,93% anual en los cinco primeros meses de 2023, el de autónomos ha crecido un 48,83% con relación al mismo tramo del pasado ejercicio.
Por otra parte, al igual que sucedía con el paro de los conductores en 2022, en los cinco primeros meses de 2023 también se registra un destacado descenso de un 12,36% para todo el colectivo profesional y que, en el caso de los asalariados, es de un 12,73% y, entre los autónomos, es de un 4,48%.
Más contratos para chóferes extranjeros
Analizando con más detalle las cifras de contratos entre los conductores de camión en los últimos años, se ve claramente cómo se ha ido incrementando la contratación de chóferes asalariados extranjeros,de tal manera que la tendencia es más evidente entre 2021 y 2022.
Así pues, si los ciudadanos foráneos suponían en 2020 un 21,51% de todos los contratos de trabajo suscritos para conductores asalariados de camión, en 2022 ese porcentaje había escalado hasta el 24,22%.
Contrasta este incremento con la escasa variación que ha registrado entre 2020 y 2022 la contratación de conductores asalariados jóvenes. En 2020 el porcentaje de jóvenes sobre el total de contratos para chóferes asalariados era de un 10,17% y en 2022 ha sido de un 10,92%, con una ligera tendencia al alza que no llega al punto porcentual en dos años.
Cada vez más parados de más de 45 años
A su vez, otro dato interesante es el crecimiento que se viene produciendo en el número de demandantes de empleo como conductor de camión con más de 45 años de edad. Entre los conductores asalariados, en 2020 eran un 76,62% del total y en 2022 han crecido hasta un 82,11%. Para el caso de los chóferes autónomos, se ha pasado del 70,37% de 2021 al 73,93% de 2022.
Puede parecer contradictorio que en un sector que demanda profesionales bien formados y con experiencia, se cierre la puerta de manera aparente precisamente a aquellos conductores con más horas al volante. Sin embargo, hay que tener en cuenta que precisamente este tipo de profesionales son, por regla general, los que más cobran.
Lo cierto es que la tendencia a la reducción en la contratación de chóferes se consolida, al igual que en el número de conductores parados, precisamente por la escasez. Al tiempo, se abre paso lenta, pero inexorablemente la contratación de profesionales extranjeros, mientras que se evidencia a las claras la incapacidad del transporte por generar ilusión para atraer a profesionales jóvenes.
Otra posibilidad es que las necesidades de contratación de las empresas de transporte españolas ya estén cubiertas, salvo picos excepcionales de actividad que no se vislumbran en estos momentos. En este sentido, lo cierto es que las estadísticas del Registro Oficial de Empresas que lleva Transportes apunta a una cierta estabilidad, con tendencia a la baja en el número de transportistas que hacen transporte público en vehículos pesados en España.
[sumario]Llama la atención el alto número de conductores de camión parados con más de 45 años de edad. Son un 82% entre los asalariados y un 74% de los autónomos.[/sumario]
En definitiva, la incertidumbre económica pasa facturaen un sector en el que dominan las pequeñas empresas. Precisamente este tipo de compañías son las que más ratio de endeudamiento acumulan y las que menos contratan, dada su estructura adaptada a las necesidades de su actividad.
Por otra parte, queda claro que el sector no consigue atraer a nuevos profesionales. Está por ver si una campaña que ponga en valor al transporte y dignifique la actividad puede revertir esta tendencia.
Al tiempo, las empresas miran cada vez más hacia afuera para encontrar el relevo que falta dentro de las fronteras del país y, aunque se produce una cierta tendencia al alza en los salarios de los conductores profesionales, el hecho de que la oferta de transporte esté controlada hace que no se desate una guerra por contar con los mejores profesionales.
