Antonio García-Patiño, consejero delegado de Daimler Trucks Iberia, analiza en exclusiva para Cadena de Suministro los pasos que está dando el fabricante hacia la electrificación del transporte, así como las novedades que se avecinan con los vehículos de hidrógeno. Para García-Patiño, la electrificación es un proceso más complejoque va más allá de la sustitución de los actuales camiones diésel por otros eléctricos y que se extiende a la red de recarga y, principalmente, al cambio de paradigma que se está produciendo entre los transportistas y los fabricantes, convertidos cada vez más en proveedores de servicios complejos que ofrecen a los empresarios del sector soluciones de movilidad y de gestión de gran complejidad. - Cadena de Suministro (CdS): La electrificación es un cambio de gran calado, ¿qué supone esta revolución para el transporte de mercancías por carretera?- Antonio García-Patiño (JMGP): Efectivamente, la electrificación supone un cambio de concepto en nuestros modelos y en nuestros valores tradicionales como marca, pero también un compromiso muy grande. Los fabricantes somos parte del problema que suponen las emisiones, somos muy conscientes de ello, y estamos introduciendo con la mayor rapidez que podemos la electrificación en nuestras gamas de vehículos. Sin embargo, no es un proceso fácil. Creo que a nivel de producto se están haciendo las cosas muy por delante de lo que sería una evolución normal, invirtiendo mucho dinero. No nos olvidemos, además, de que en nuestro caso los vehículos que vendemos tienen que tener un valor acorde con el mercado, porque están destinados a empresas que necesitan crear valor. Pero la cuestión que nos preocupa y que no depende de nosotros es el tema de la infraestructura de carga, que creo que es el talón de Aquiles de todo el proceso de electrificación del transporte no solo en España, que somos el peor país en infraestructuras de recarga para camiones, sino también en toda Europa. Se está invirtiendo dinero, pero capilarizar la red de recarga es un reto. Luego, además, está la forma de carga y todo lo que tiene que ver con infraestructuras, acometidas, autorizaciones e inversión. Todos estos factores son, en mi opinión, el verdadero cuello de botella de la electrificación del transporte en Europa. 
Mercedes Trucks acaba de presentar en Portugal sus avances en electrificación de su gama de camiones. - CdS: ¿Están los vehículos eléctricos en condiciones de igualar el coste total de adquisición de sus equivalentes diésel?- AGP: Evidentemente para analizarlo hay muchas variables, pero creemos que con el nuevo vehículo de larga distancia que sale ahora se da un paso adelante muy importante. Sin embargo, existen otras muchas variables que no controlamos como el precio de la energía. La estabilidad de los precios de la electricidad es otro reto, junto con el modo en que se produce la energía. Además, tampoco es fácil llevar la electricidad en las condiciones que se requieren a zonas alejadas y poco pobladas. Este es el verdadero esfuerzo que tenemos que hacer y tengo la sensación de que la Administración no es consciente de este problema, pese a que, tarde o temprano, tiene que resolverse. [sumario]No veo una caída de mercado, todo lo contrario. Veo una necesidad importante de renovación, especialmente en la flota internacional.[/sumario] - CdS: ¿Cómo ve la actual situación del mercado?- AGP: En los últimos ejercicios, los fabricantes nos hemos venido enfrentando a un problema de producción que muchas veces pensamos que es por la falta de microchips pero que en realidad ha sido que ha faltado un poco de todo. Las fábricas en Europa están muy ajustadas a los volúmenes que demanda el mercado y cuando hay un parón por falta de componentes todo se altera. Creo que hay cierta necesidad de renovación de los parques, porque en los últimos años, debido a la falta de producción y de componentes, no hemos podido atender a las necesidades de los clientes. En este sentido, hay una demanda retenida y evidentemente ha habido un efecto pánico. El transporte necesita vehículos adecuados y ahora hay que renovar. Creo que para este 2023 estaremos entre las 24.000 y las 25.000 unidades. No veo una caída de mercado, todo lo contrario. Veo una necesidad importante de renovación, especialmente en la flota internacional. 
La administración no es consciente del esfuerzo que hay que hacer para tener una infraestructura de carga de camiones que apoye la electrificación de las flotas de transporte. - CdS: En los últimos años, el mundo del camión está evolucionando hacia un servicio, ¿cómo ve este proceso?- AGP: A la hora de la verdad, el transportista considera al vehículo una parte de su coste y si lo puede hacer fijo, mejor. Cada vez se está generalizando esa tendencia de ir hacia una cuota mensual. Con la electrificación, esta tendencia se acentúa porque hay algunas variables de costes que decrecen, como reparación y mantenimiento probablemente, pero, sin embargo, el valor del vehículo va a ser mayor. [sumario]La infraestructura de carga es el talón de Aquiles de todo el proceso de electrificación del transporte no solo en España, sino también en toda Europa.[/sumario] Al final, al cliente lo que le interesa es saber cuánto le cuesta el camión al mes para poder ofertar sus servicios. Además, es muy importante en este nuevo mundo en que nos metemos de los vehículos eléctricos ver cómo ajustamos el tema de la consultoría. Es decir, ahora un transportista tiene que planificar muy bien salidas, llegadas, puntos intermedios y paradas. Ese servicio es muy necesario cuando se quiere electrificar el transporte. - CdS: Más allá de la electrificación, ¿qué papel está llamado a jugar el hidrógeno en la transición energética?- AGP: En mi opinión, van a convivir las tres tecnologías mucho tiempo. Primero porque el diésel es imbatible a día de hoy y tiene un nivel de emisiones bastante aceptable y, segundo, porque no podemos transformar un parque tan grande y complejo de la noche a la mañana. Sin embargo, tarde o temprano el motor diésel desaparecerá. El eléctrico para la corta y media distancia es imbatible en coste y el hidrógeno se dibuja como la alternativa para reemplazar en su momento al diésel. Vamos a ver qué pasa con el motor de combustión de hidrógeno, en el que tenemos previstas inversiones. 